Todos los "sospechosos habituales" están aquí en esta versión de gambas al ajillo, ¡más la adición de tocino! Sirva sobre fettuccine cocido, linguini o la pasta de su elección, y pan crujiente, ¡para que pueda recoger cada gota de la deliciosa salsa! Una ensalada verde, o un calabacín salteado, completará esta comida maravillosamente.