Esta era la receta de mi abuela y sigue siendo una de las favoritas de la familia ... Debe servirse con cerdo asado, chucrut y un buen vaso de cerveza. Una forma muy tradicional de comer las albóndigas sobrantes al día siguiente para el desayuno o el brunch es cortarlas en cubos y freírlas en un poco de mantequilla; luego agregue los huevos y la leche, y cocine como si estuviera haciendo huevos revueltos. Es genial.